Cada vez más frecuente las corporaciones municipales realicen aseguramientos de armas de fuego hechizas a transeúntes que no necesariamente se ven involucrados en un hecho ilícito sino que algunas ocasiones las encuentran en revisiones, sin embargo su portación y uso representa un ilícito, además de ser riesgoso.
El mando comisario de la Policía de Guadalajara, Juan Pablo Hernández González, durante su carrera policial ha realizado diversos aseguramientos de ese tipo de artefactos, por lo que advirtió sobre las situaciones de riesgo a las que se exponen quienes las manipulan.
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“Sabemos que ha habido accidentes por el uso de estos artefactos, que pueden ser peligrosos y poner en riesgo su integridad y perder extremidades. Esto porque los materiales y el proceso de fabricación no siguen estándares y muchas veces son un simple tubo que se golpea con un martillo para accionar el mecanismo de la bala”, expuso.
La detonación del proyectil puede romper el arma y lesionar al portador, además de que el sólo portarla ya implica un ilícito. No existe un estudio sobre las razones por las que se fabrican esas armas, pero puede atribuirse que existan en la ciudad, debido a su fácil fabricación.
El precio oscila entre los mil y tres mil pesos, mientras que una de marca alcanza un valor en el mercado negro de entre 15 y Armas hechizas caseras son más usadas. 25 mil pesos dependiendo el calibre.
