El rey ha muerto ¡larga vida al rey! Edson Arantes Do Nascimento “Pelé” falleció este jueves a la edad de 82 años y con ello las anécdotas comienzan a fluir, una de ellas es que el considerado como el mejor futbolista de todos los tiempos, vino a México, específicamente a Guadalajara para ser parte del entonces Club conocido como los Gallos de Jalisco.
Corría el año de 1974 y en la memoria aún estaba fresca la imagen en la que el astro carioca levantaba la entonces Jules Rimet, la tercera Copa del Mundo en su haber, después de la conquista en Chile 62 e Inglaterra 66, legado que dejó hasta el día de su partida al mundo celestial.
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Fue entonces que el conjunto de los Gallos, quienes venían de una magra campaña, decidieron apostar por traer de vuelta a Guadalajara a O Rei, pues en el equipo se encontraba como promotor el también brasileño Ney Blanco de Oliveira, quien mantenía una estrecha amistad con Pelé. Fue ese lazo que motivó a Edson Arantes a aceptar la invitación de los también llamados Gallos Azucareros, para participar en un cuadrangular junto al Atlas, la Universidad de Guadalajara y Chivas.
El 9 de octubre de 1975 es la fecha en la que Pelé llegó a México, justo el mismo día en que comenzaría el mini torneo entre jaliscienses. El contrato del amazónico estipulaba en dar una charla para 40 mil niños en el Monumental Estadio Jalisco. Además, Pelé aceptó ser socio honorario del Jalisco y se enfundó en su casaca para posar en la foto con figuras como Valerio Franco, Alfredo “Harapos” Morales y Gamaliel Ramírez.
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Al final los resultados de la competencia fueron lo de menos para los cientos de aficionados que acudieron al Estadio Jalisco, pues la presencia de Edson Arantes Do Nascimento, después de cinco años de ausencia, valió todo, en una tierra donde se magnificó en la cúspide del balompié mundial y se ganó su lugar en la mesa de las grandes leyendas.
Pelé pudo ser de Chivas por un día
Fue en la temporada 1943-44 cuando el futbol se profesionalizó en México y las Chivas comenzaron su andar por los campos de la Primera División y es en ese inter, de acuerdo a la visión del empresario Ignacio López, quien deseaba que el equipo fuera diferente a todos, mantuvo la regla no escrita de jugar con solo mexicanos.
Esto pudo haberse roto años más tarde, pues de acuerdo al reglamento del cuadrangular en cuestión, se estipulaba que en caso de que el Guadalajara lograra acceder a la Final, podía reforzarse ¡con Pelé! El hecho hubiera sido histórico y sería hasta ahora el único extranjero en jugar con los rojiblancos; sin embargo, el destino se negó a que sucediera, pues el Rebaño terminó por sucumbir frente a los Leones Negros y así mantener sana la tradición desde el año de 1944.
