El gobierno federal estaría dispuesto a que Petróleos Mexicanos (Pemex) retrase el pado del Derecho de Utilidad Compartida (DUC) para permitir que la paraestatal cuente con la liquidez necesaria para pagar los 2 mil 500 millones de dólares comprometidos por amortizaciones de deuda este año.
El subsecretario de Hacienda, Gabriel Yorio, detalló este 13 de abril que Pemex, una de las petroleras más endeudadas del mundo, ha pagado 6 mil millones de dólares en amortizaciones de deuda en 2023.
“La forma en la que lo podemos hacer de manera muy rápida es proveerle liquidez a Pemex, no a través de una capitalización, sino permitirle que no nos pague inmediatamente el ‘royalty’, el derecho de utilidad compartida”, dijo Yorio en una entrevista con Reuters en el marco de las reuniones de primavera del Fondo Monetario Internacional (FMI) y Banco Mundial.
“Eso aproximadamente les da un flujo de efectivo de 2 mil millones de dólares“, añadió el subsecretario.
El DUC, del 40 por ciento, es el impuesto más significativo que Pemex debe de pagar al Estado, que ha apoyado en los últimos años a la paraestatal con millonarias inyecciones de capital para aliviar sus finanzas.
Sobre la recientemente anunciada compra de plantas de la española Iberdrola, el funcionario dijo que dentro de un año se creará un vehículo financiero que concentrará a inversores públicos, entre ellos un fondo estatal de infraestructura, el Fonadin.