Hartas de la violencia, miles de mujeres tomaron las calles de Guadalajara para exigir un cese a la violencia de género, para poder tener espacios libres de acoso, calles para poder transitar con tranquilidad sin temor de actos violentos que las vulneran.
Alrededor de mil 500 feministas de las agrupaciones: Frente Feminista Radical de Guadalajara y Aquelarre Radical Guadalajara, marcharon de la Plaza de la República que se ubica en avenida México y Chapultepec, hasta el Centro tapatío en la zona donde se ubica la Antimonumenta.
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Después avanzaron por la avenida Vallarta, al llegar a la Rectoría de la Universidad de Guadalajara, expresaron su inconformidad por los casos de acoso sexual, en contra de alumnas, por lo que quebraron los cristales de la fachada de la casa de estudios.
También fueron grafiteandos los leones blancos que se ubican al pie del edificio. También fueron dañadas las esculturas ubicadas en el exterior, entre ellas la de Fray Antonio Alcalde, a la cual le colocaron brassieres.
Al avanzar el contingente, también quebraron los cristales de la tienda Soriana, que se ubica en Juárez y Enrique González Martínez, en donde se intentó realizar rapiña, pero fue impedido por el personal del supermercado.
La sucursal del Banco del Bienestar también sufrió daños, por parte de las radicales. Igual situación fue en la tienda Mumuso, de Juárez y Galeana, además de la tienda departamental Liverpool de Juárez y Paseo Alcalde.
La estructura exterior del elevador de la estación Guadalajara Centro de la Línea 3 del Tren Ligero, también presentó afectación.
Alrededor de la Antimonumenta, las feministas se reunieron y expresaron algunas situaciones de violencia que han vivido. Algunas de las que compartieron su dolor por casos de acoso y abuso sexual, aseguraron que era la primera vez que participaban en la manifestación.
A los cinco años fue abusada
Cristal, de 19 años, expuso que tenía 5 años cuando fue abusada sexualmente por un familiar.
“A los 5 años no tenía conocimiento de lo que me hizo ese familiar estaba mal pero igual continúe con mi vida. A las 9 iba a clases de inglés y me tocaba caminar en mi colonia y sufrí acoso. Cada vez que iba a la tienda el señor me esperaba en la esquina sin ropa interior, mostrándome dinero, así se la pasó un mes, hasta que le conté a mi mamá.
“Lastimosamente mi mamá -quien sufrió abuso a los 13 años- entiendo que está lastimada y su respuesta fue ‘fue tu culpa porque le sonreíste’. A los 14 años, mi papá abusó de mí”, expresó entre llanto.
Hubo quemas en Chapultepec
Mientras eso pasaba en la Antimonumenta, en la Plaza Imelda Virgen, otro grupo de radicales también expresó su enojo por las situaciones de violencia que se viven en Jalisco y causaron daños en el banco BBVA de dónde sacaron un sillón y lo quemaron.
Igualmente hubo afectación en la sucursal de Santander, de Chapultepec y Lerdo de Tejada, además del Centro de Atención Telcel de Chapultepec y en la Universidad Lamar, en donde quemaron butacas.
