Los creadores argentinos, Emilio García Wehbi y Maricel Álvarez compartieron su experiencia con un grupo de artistas mexicanos convocados por la Secretaría de Cultura de Jalisco para un performance duracional que presentaron el fin de semana.
Como un laboratorio para el futuro, donde se experimenta desde la subjetividad de los individuos a partir de la vida misma, pero inspirados en el arte-, es la descripción que hacen los artistas argentinos Emilio García Wehbi y Maricel Álvarez, de la residencia que realizan en la entidad, por medio de la Secretaría de Cultura de Jalisco (SC).
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Los creadores dirigieron una residencia transdisciplinar en la que 15 participantes de diversas áreas trabajaron en el performance que presentaron el sábado 20 y domingo y 21 de agosto, donde basados en Moby Dick de Herman Melville, experimentaron “un cruce de lenguajes” reinterpretando esta historia y mostrándola al público desde las artes visuales, las escénicas, las sonoras y hasta gastronómicas.
La Secretaría de Cultura de Jalisco convocó a creadores de más de 10 disciplinas para formar parte del diverso grupo de esta residencia que fue del 1 al 17 de agosto a cargo de estos artistas argentinos con gran experiencia en este ámbito y que ya habían trabajado en otras ciudades del país con ejercicios similares, pero nunca lo habían hecho en Guadalajara.
Además de esta residencia, Emilio y Maricel presentaron el jueves 18 de agosto en el Teatro Degollado la obra Das Kapital donde deconstruyeron esta pieza de Karl Marx de una manera muy entretenida en un rápido diálogo de unos 40 minutos entre ambos artistas. Asimismo Emilio García aprovechó su estancia para presentar en Guadalajara su libro “El Periférico de objetos”.
Este libro fue publicado recientemente por Ediciones Documenta, en donde testimonia, desde uno de sus protagonistas, los 20 años de vida del grupo llamado El Periférico de objetos, del que también fue parte Maricel.
El artista transdisciplinar Emilio García, explica: “Montamos performance duracional, de 12 horas el sábado y 12 horas el domingo, por lo que Moby Dick resultó ideal. Se trata en realidad de una experiencia tanto para los intérpretes como para los espectadores que pudieron entrar y salir de la sala cuantas veces quisieron en los dos días”.
Emilio mencionó que el proceso ha sido “muy intenso donde hay una transmisión de saberes muy importantes entre los compañeros de las diversas disciplinas”.
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El autor recordó que esta presentación fue en el Foro de Arte y Cultura. Por su parte Maricel Álvarez, destacó y agradeció “la complicidad” de las autoridades de la Secretaría de Cultura de Jalisco que apuestan por nuevos lenguajes como éste de la transdisciplina: “ellos son piezas clave al responder a este tipo de formatos menos conocidos; interlocutores que se atreven a probar por producciones en donde no está todo dado, donde no se siguen caminos ya transitados”.